Lo bueno de los cambios en la vida ( y en la comida)
Por admin_feliz | 4 de diciembre 2015¿Quién no los ha vivido? A veces nos paralizan, otras veces los enfrentamos como los más valientes del mundo. Lo cierto es que la vida está llena de cambios y transformaciones, y aunque suene cliché, siempre traen buenas cosas.
Al igual que en la vida, en la alimentación podemos llevar a cabo cambios positivos que generen hábitos permanentes en el tiempo. Para esto, resulta fundamental tener nuestros objetivos claros. Estos son variados, puedes querer comer mejor para mantener un peso saludable, estar sano y ágil, verte delgado, cuidar tu imagen, sentirte bien contigo y tantos otro más. Sin embargo, como experiencia y consejo, visualizar como fin principal el estar sanos y llenos de energÃa, es una gran fuerza motivadora que promueve los cambio de hábitos alimentarios, incluso de por vida.
Es importante para esto, ir de a poco y paso a paso, de forma constante en el tiempo. Si como mucho, no realizo ejercicios, tomo mucha gaseosa y no tengo horarios para alimentarme, cambiar todo este panorama de golpe, lo más probable, es que cree más ansiedad, menos tolerancia, abandonando tarde o temprano, todo lo logrado.
Si en tu lista de propósitos para el nuevo año que viene, estará alimentarte mejor y cuidar tu salud, aquà van algunos consejos que pueden servirte. Proponte dos para comenzar y seguir avanzando:
- Toma un vaso de agua tibia con limón en ayunas, todas las mañanas. Limpiará tu cuerpo, mejorara tu salud y encenderá tu metabolismo.
- Cambia el pan blanco por pan integral o multicereal.
- No dejes pasar más de cuatro horas sin comer. Trae contigo una fruta, barra cereal o frutos secos para comer entre comidas.
- Cambia el azúcar blanca por panela y stevia en hoja.
- Si tu plato tiene arroz y papas u otra mezcla de cereales, procura que ocupen solo ¼ de tu plato.
- Disfruta del dulzor natural de los jugos de frutas sin adicionar azúcar.
- Al preparar arroz, cocina mitad arroz blanco y mitad integral.
- Cambia el aceite vegetal por aceite de oliva, para cocinar y aliñar.
- Come lento y pausado. Proponte como primera meta, demorar al menos 20 minutos en terminar tu plato.
- Cambia el chocolate de leche por uno con 60% o más de cacao.
- Asegura al menos en almuerzo o cena un plato de verduras crudas, salteadas o cocidas al vapor. Tu próxima meta será en ambas comidas.
- Cambia la gaseosa azucarada a gaseosa sin azúcar. Más adelante, proponte reemplazarla por agua e infusiones de hierbas.
Vamos ¡Comienza hoy mismo tus cambios!
Que post más interesante. De a pocos es más fácil, mi meta es comer mejor, más sano y bajar de peso. Gracias